Certificación Energética

 

Certificación Energética

 

Por qué es necesario 

Porque desde que el pasado 5 de Abril de 2013, está aprobado por el Gobierno el Real Decreto de eficiencia energética de edificios, por el que los propietarios de inmuebles destinados al alquiler o venta quedan obligados a expedir el certificado de eficiencia energética.

Para qué sirve

El certificado de eficiencia energética permite conocer la calificación de la vivienda según una escala de eficiencia energética establecida en función de la demanda energética de la misma, pudiendo oscilar dicha calificación entre la "A" (mayor eficiencia) y la "G" (minima eficiencia). La certificación debe ir acompañada de un documento de recomendaciones sobre las mejoras que se aconsejan realizar en las viviendas, con el objeto de mejorar la eficiencia energética y conseguir optimizarla.

Por qué realizarla con nosotros 

Una Certificación Energética realizada mediante el método simplificado aplica "valores por defecto" a las características técnicas constructivas de la misma, y le resultará en principio económicamente más ventajosa, ya que como ya habrá visto en otras páginas, le cobrarán "menos que lo que le cobra por la salida el técnico que le repara su lavadora" por poner un ejemplo. Sin embargo, también puede realizarse un estudio más detallado de los aislamientos, acristalamientos, muros, soleamiento, etc, de su vivienda. Ambos métodos son igual de válidos, aunque está comprobado que la diferencia entre ambos sistemas puede llegar a ser de dos letras en la escala de calificación. Es decir, si aplicando valores por defecto a una vivienda se obtiene una calificación "G", (la más desfavorable de todas desde el punto de vista energético, con exceso de gasto y pésimo aprovechamiento energético), utilizando los valores reales de los componentes constructivos, la misma vivienda obtiene una calificación "E", es decir, estaría en la mitad de la tabla, dando un resultado más ajustado a la realidad y energéticamente más favorable.

Por qué ajustar la calificación energética

La calificación resultante puede influir directamente sobre el valor del inmueble: obtener una calificación alta incrementará el valor de alquiler o venta del inmueble, al requerir menor gasto en energía y ahorrarse el nuevo propietario o inquilino un dinero en calefacción, agua, electricidad, etc.. Por el contrario, en caso de obtener una calificación baja, el comprador deberá realizar una inversión, en muchos casos cuantiosa, para mejorar el confort de la vivienda, pudiendo con este argumento negociar la rebaja en el precio de venta o alquiler del piso.
Además, es casi seguro que la letra obtenida en la calificación energética sirva en un futuro no muy lejano como referencia para establecer las reformas necesarias de mejora de la calificación, y por lo tanto, cuanto mejor calificación obtenga su vivienda, menor inversión en mejoras. Si se decide por una calificación poco ajustada a la realidad constructiva de su vivienda, es posible que en un corto plazo de tiempo tenga que volver a realizarla si no quiere realizar obras excesivas en alcance y presupuesto, con lo que el ahorro buscado en la certificación se habrá volatilizado.

Por qué contratarnos

Es el propietario, y no el Agente de la Propiedad Inmobiliaria que le gestione la venta, el que debe asegurarse acerca de quién está detrás del certificado energético de su vivienda, tanto en la inspección como en la redacción, ya que nadie da duros a cuatro pesetas: . conceptos como "certificados baratos", "desde x euros" no parecen términos que se puedan asociar a un trabajo bien hecho y que vele por sus intereses. Una certificación a precio de saldo se la harán reduciendo costes, entre otros del tiempo destinado a toma de datos, al análisis de los mismos, al estudio de las medidas de mejora, etc., y le aplicarán a su vivienda "valores por defecto", lo que a medio plazo le saldrá caro. No olvide que al final la Certificación Energética sirve para comercializar el inmueble durante 10 años, y esto es mucho tiempo para arrastrar una lacra por ahorrarse unos pocos euros.

Llámenos y le prepararemos un presupuesto sin compromiso. Se sorprenderá: una certificación energética ajustada a las características constructivas reales de su vivienda no le resultará en absoluto cara, y las ventajas que obtendrá con ello serán sustanciales.